SARS-CoV-2 la vacuna de la viruela, una buena lección para "negacionistas" varios. XXVI

Los datos van mejorando poco a poco, ayer : 10.829 nuevos infectados, 337 fallecidos y una incidencia acumulada de 349.

Hoy hay dos noticias una buena y otra mala: 

• La buena es que la Ministra de Sanidad por fin demuestra algo de sentido común al recomendar mucha prudencia con la relajación de medidas. Parece que por fin se va dando cuenta de que "desescalada" a lo loco significa MUERTE. y esto es un paso adelante muy importante.
• La mala es que la Ministra de Sanidad parece que no es capaz de darle a las distintas Autonomías unas normas básicas para conseguir que el proceso de vacunación sea uniforme y no vaya "por libre" en cada una de ellas.

Han pasado ya más de 40 años desde que el hombre, por medio de una vacuna consiguió erradicar definitivamente una enfermedad que azotó a toda la humanidad durante miles de años. Solo en el siglo XX la viruela acabó con la vida de 300 millones de personas.

El Director General de la Organización Mundial de la Salud: Tedros Adhanom Ghebreyesus afirmó “hoy la viruela es la única enfermedad humana erradicada, una prueba de lo que podemos conseguir cuando todas las naciones trabajamos juntas. Ante las enfermedades epidémicas, tenemos una obligación y un destino compartidos".

Sabias palabras de Tedros, aunque parece que los actuales líderes políticos no las han entendido bien, ya que primero se empeñaron en ir "a su bola" y después nos han dividido en "pequeños núcleos de resistencia", dando "libertad" a las autonomías para que cada una haga lo que se le ocurra a sus dirigentes. Han hecho justo lo contrario de lo que había que hacer.

Hace ya muchos años la escritora británica Lady Mary Wortley Montagu trajo a Londres la costumbre de la variolización  como medida profiláctica que había observado en Turquía durante uno se sus viajes. Ya en Inglaterra inoculó a sus propios hijos pero esas prácticas no fueron bien recibidas por los científicos de su época. Pasados unos años el médico inglés Edward Jenner, (ver entrada del día 9 de junio de 2013) que había leído los escritos de Montagu, al comprobar que las ordeñadoras con heridas en las manos no padecían de viruela, inoculó el fluido que extrajo de las pústulas de las manos de una ordeñadora  al hijo de su jardinero de 8 años de edad James Phipps, el joven tuvo algo de fiebre durante dos días, pero no padeció la viruela aunque Jenner le inyectó posteriormente virus activos de esa enfermedad. Jenner había descubierto un método profiláctico (preventivo) que iba a revolucionar el mundo de la medicina e iba a salvar millones de vidas, aunque los médicos de la época tampoco supieron valorar su verdadera importancia. El nombre de vacuna es posterior y se debe a Louis Pasteur que se lo puso en honor a Jenner.

El cirujano español Javier de Balmis, (¿os suena de la operación conjunta del Ejército, Guardia Civil y Policía para enfrentarse al coronavirus?) enterado de los logros de Jenner en Inglaterra habló con el rey Carlos IV y consiguieron organizar la Expedición Filantrópica de la Vacuna, que en el año 1803 partió del puerto de la Coruña con destino a Centroamérica. Balmis viajó con 22 niños huérfanos que serían los que transportarían la vacuna a través de su inmunización, la viruela de una vaca se inoculó en un niño, en unos 10 a 12 días desarrollaba unas erupciones que emitían un fluido y se inoculaba en el siguiente niño manteniendo así la cadena que sirvió para vacunar a más de 500.000 personas, millones de personas se beneficiaron de las campañas de vacunación en las Casas de Vacunación públicas que se pusieron en funcionamiento.

La última epidemia de viruela se declaró en Somalia en el año 1977 y gracias a la vacunación de todas las personas que tenían contacto con los afectados se logró acabar con la enfermedad definitivamente. Desde entonces no se ha vuelto a producir ni un solo caso de viruela en el mundo.

El virus de la viruela es un virus DNA y los virus DNA tienen una capacidad de mutación muy pequeña comparada con la de los virus RNA como el SARS-CoV-2 , por ello solo se tuvo que desarrollar una vacuna.

El virus de la Influenza (Gripe) y el SARS-CoV-2 son virus RNA y tienen por tanto una gran capacidad para mutar, por eso las vacunas de la Gripe son diferentes cada año y va a pasar exactamente lo mismo con el coronavirus, las vacunas del próximo año por fuerza deberán de ser diferentes de las actuales.