miércoles, 11 de marzo de 2015

WERNER, NATHANS y SMITH. El comienzo de la Ingeniería Genética

Werner
Smith
Nathans
Arber Werner (1929) Microbiólogo suizo, hizo su doctorado en la Universidad de Ginebra, trabajó en la Universidad de Los Ángeles y fue profesor de Genética y Microbiología en Ginebra y Basilea. Investigó en el campo de los virus bacteriófagos y descubrió que las bacterias tienen unos enzimas, endonucleasas de restricción, que son capaces de cortar grandes moléculas de DNA en fragmentos más pequeños, y lo hacían en lugares muy concretos, las secuencias de reconocimiento. El descubrimiento de las endonucleasas de clase I fue muy importante porque abrió un camino decisivo en el avance de la ingeniería genética.

Daniel Nathans (1928-1999) Biólogo estadounidense, estudió en las Universidades de Delaware y San Luis y fue profesor en la Universidad Johns Hopkins de Baltimore, donde coincidió con Hamilton Othanel Smith y dirigió el departamento de Microbiología. Dos años después de que Werner descubriera las endonucleasas de clase I, Nathans descubrió la primera endonucleasa de clase II. Estas últimas resultaron mucho más útiles pues cortan las cadenas de DNA en lugares donde aparece una secuencia bipalindrómica de nucleótidos (la secuencia de una cadena es idéntica a la de la otra pero están situadas en sentido inverso).
Utilizando la restrictasa descubierta por Smith, Nathans obtuvo por primera vez el mapa genético de un virus (el del virus SV40).

Hamilton Othanel Smith (1931) Científico estadounidense, estudió medicina en las Universidades de Illinois, Berkeley y Baltimore, fue profesor en  Míchigan y Baltimore y colaboró con el Instituto de Biología Molecular de la Universidad de Zúrich. El mismo año en que Nathans descubrió las endonucleasas de clase II, Smith descubrió, estudiando la interacción entre el virus bacteriófago P22 con la bacteria Haemophilus influenzae, una nueva enzima restrictasa, la HindII. Con ella Nathans descifró el mapa genético del virus SV40.

Estas endonucleasas de restricción de clase II han resultado esenciales en el desarrollo de la INGENIERÍA GENÉTICA y por ello Arber, Nathans y Smith obtuvieron en 1978 el Premio Nobel de Fisiología y Medicina.

No hay comentarios:

Publicar un comentario